Si usted es una de las millones de personas en los EE. UU. Que tienen venas varicosas, se da cuenta de que pueden ser más que un problema cosmético. Las venas varicosas pueden causar dolor, hinchazón, picazón o sensibilidad en las piernas, así como calambres y coagulación de la sangre. En casos severos, las venas varicosas pueden provocar decoloración de la piel, endurecimiento de los tejidos y ulceración de la piel.
El tratamiento de las venas varicosas en sus primeras etapas, antes de que los síntomas progresivos tengan tiempo de volverse permanentes, proporciona el mejor pronóstico. Afortunadamente, muchos cambios simples en el estilo de vida pueden ayudar a controlar estos síntomas e incluso prevenir el desarrollo de nuevas venas varicosas.
Estar de pie o sentado durante un período prolongado sofoca el flujo sanguíneo regular a través de las venas de las piernas. Este flujo sanguíneo reducido hace que aumente la presión en las venas, lo que a su vez puede crear acumulación de sangre alrededor de los tobillos e hinchazón en los pies y las pantorrillas. Finalmente, pueden aparecer venas varicosas. Si su estilo de vida o trabajo no implica un movimiento regular, haga un esfuerzo consciente para introducir cambios periódicos de posición y caminatas cortas en su día. También es posible que desee introducir pequeños ejercicios, como pedalear o estirar los tobillos, para disminuir aún más la presión venosa y mejorar la circulación sanguínea.
La ropa restrictiva crea un efecto de torniquete que puede reducir el flujo sanguíneo a través del cuerpo. Cambie los estilos ajustados e inflexibles por prendas más holgadas y cómodas que admitan un mayor rango de movimiento y un flujo sanguíneo más fácil. Los zapatos de tacón alto también deben limitarse a ocasiones especiales, en lugar de usarlos a diario. Tanto tus pies como tus venas te agradecerán esos zapatos planos.
Siempre se recomienda una dieta equilibrada, pero puede desempeñar un papel adicional en la prevención o reducción de los síntomas de las venas varicosas. Apunte a una mezcla de proteínas, carbohidratos complejos y grasas saludables. Evite los alimentos con alto contenido de sal y azúcar procesada, que ejercen presión sobre su sistema vascular y pueden exacerbar los problemas venosos con el tiempo. Beba abundante agua en el transcurso del día para mantener la hidratación y la circulación sanguínea adecuadas.
Fumar cigarrillos aumenta significativamente el riesgo de desarrollar una variedad de enfermedades, incluidos los trastornos venosos. Junto con la restricción de la circulación y el estrechamiento de las paredes de los vasos sanguíneos, los químicos en los cigarrillos pueden impedir el flujo de oxígeno en la sangre, hacer que la sangre sea más gruesa y aumentar el riesgo de coagulación de la sangre. Estos cambios contribuyen al desarrollo de las venas varicosas y aumentan la probabilidad de desarrollar complicaciones asociadas, como úlceras.
Al igual que una dieta saludable, el ejercicio regular es parte de un estilo de vida saludable que también puede desempeñar un papel en la prevención de las venas varicosas. El ejercicio minimiza el riesgo de enfermedad venosa al fortalecer el mecanismo que devuelve la sangre desde la parte inferior del cuerpo al corazón. Si tiene sobrepeso, la pérdida de peso como resultado del ejercicio mejora la circulación aliviando el exceso de presión sobre las venas.
Caminar es una actividad práctica de bajo impacto que estimula la circulación sanguínea mientras fortalece y estira las pantorrillas. Las máquinas elípticas, las bicicletas estacionarias, la natación y el yoga también brindan beneficios en el flujo sanguíneo con un estrés mínimo en las articulaciones. Para un entrenamiento más vigoroso, intente trotar, correr o levantar pesas.
Las medias y medias de compresión ejercen una presión suave y constante sobre las piernas. Este sutil apretón ayuda a las venas y los músculos de las piernas a mover la sangre de manera más eficiente para prevenir las venas varicosas mientras reduce la acumulación de sangre, la hinchazón y el dolor causado por cualquier problema venoso actual. Las prendas de compresión vienen en una variedad de fortalezas. Algunos están disponibles solo con receta. Hable con su médico sobre qué opción será más efectiva para usted.
Incluso sus horas libres pueden contribuir a venas saludables. Al descansar, dormir o realizar actividades relajantes como leer o mirar televisión, eleve las piernas. Mantener las piernas más altas que el nivel del corazón, aunque solo sea por unos minutos a la vez, mejora la circulación y puede ayudar a reducir la hinchazón de las piernas causada por un estilo de vida sedentario.
El embarazo es uno de los muchos factores que pueden exacerbar el riesgo de desarrollar venas varicosas. Los cambios hormonales durante el embarazo pueden conducir a un aumento de los niveles de progestina que dilatan o abren los vasos. Además, el útero ejerce presión sobre la vena cava inferior (la vena que transporta la sangre desde la parte inferior del cuerpo hasta el corazón), contribuyendo aún más a las venas varicosas. Duerma sobre su lado izquierdo para mantener la presión fuera de esta vena principal, que se encuentra en el lado derecho de su cuerpo.
No todas las venas varicosas se pueden prevenir. Algunos de los factores que pueden aumentar su riesgo de esta afección, como los antecedentes familiares o la edad, son imposibles de evitar a pesar de llevar un estilo de vida saludable. Las estrategias anteriores pueden ser útiles para prevenir la formación de venas varicosas. También pueden ayudar a reducir el tamaño y el dolor de las venas varicosas existentes, así como a mejorar su apariencia.
Si desarrolla venas varicosas que no se pueden aliviar con métodos más conservadores, puede ser aconsejable el tratamiento médico para mejorar los signos y síntomas de la afección. En el Centro para la Restauración de las Venas, tratamos a los pacientes con técnicas innovadoras que mejoran la estética y la salud vascular sin cirugía invasiva. Estos tratamientos pueden usar soluciones inyectables, tecnología láser o energía de radiofrecuencia para tratar las venas afectadas sin anestesia general. Por lo general, no hay tiempo de inactividad posterior para que pueda volver a su rutina rápidamente.
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