Revisado médicamente por Mark A. Edelman, MD, DABVLM, el 6 de octubre de 2025
Imagina que estás descansando en casa o preparándote para dormir cuando, de repente, notas sangre bajando por tu pierna. Te acercas y te das cuenta de que proviene de una vena varicosa. La imagen puede ser impactante, y muchas personas se sorprenden de lo rápido que fluye la sangre. Aunque la abertura en la piel parece pequeña, la presión dentro de la vena hace que el sangrado parezca mucho más dramático.
Si esto alguna vez te ha pasado, debes saber que no estás solo. El sangrado es una complicación conocida de las venas varicosas y, aunque puede ser aterrador, existen pasos seguros que puedes seguir de inmediato para controlarlo. Igual de importante, saber cómo dar seguimiento con un especialista en venas te ayudará a prevenir que vuelva a suceder.
En este blog, Mark A. Edelman, MD, DABVLM, médico principal en las clínicas de venas de CVR en Norwalk, Connecticut, y Stamford, Connecticut, explica cómo reconocer el sangrado de venas varicosas, los pasos correctos de primeros auxilios a seguir cuando ocurre un sangrado, cuándo buscar ayuda médica y los tratamientos modernos disponibles para prevenir futuros episodios.
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Dado que el sangrado en las piernas puede ocurrir por varias razones, reconocer los signos del sangrado de una vena varicosa es fundamental. Las venas varicosas que sangran suelen presentarse en la parte inferior de la pierna o el tobillo, donde las venas están más cerca de la superficie. Ten en cuenta que la piel en esta zona puede ya verse estirada, delgada o oscurecida debido a otros síntomas de enfermedad venosa.
Si la vena se rompe, el sangrado generalmente luce diferente al de un corte pequeño. La sangre puede salir rápidamente y, a veces, en un flujo constante en lugar de un goteo lento. Incluso una abertura pequeña puede liberar una cantidad sorprendente de sangre, ya que la vena está bajo presión.
Una buena regla general: si tienes venas varicosas visibles y notas un sangrado abundante después de golpearte o rascarte la pierna, es muy probable que la fuente sea una vena y no solo la piel. Reconocer esto rápidamente es importante porque debes manejarlo de manera distinta a un simple rasguño.
Si una vena varicosa comienza a sangrar, recuerda mantener la calma y actuar rápido. Asegúrate de seguir estos pasos de inmediato:
⚠️IMPORTANTE: Incluso si el sangrado se detiene, programa una visita con un especialista en venas para prevenir otro episodio. Una vez que una vena sangra, se debilita y es más propensa a sangrar de nuevo, lo que hace que el tratamiento oportuno sea fundamental.
Aunque algunos sangrados pueden manejarse en casa, hay momentos en los que debes buscar atención médica inmediata. Llama a emergencias si:
👉 Además: programa una visita con un especialista certificado en venas una vez que el sangrado esté bajo control, ya que esto puede indicar venas frágiles. El especialista puede examinar el área, identificar otros puntos débiles y recomendar tratamientos para fortalecer la salud de tus venas.
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Puede ser tentador continuar con tu rutina normal una vez que el sangrado se ha detenido, pero los riesgos no terminan ahí, e ignorar una vena que sangra puede llevar a varias complicaciones. Además del mayor riesgo de sangrado futuro, las complicaciones posibles incluyen:
Estos riesgos subrayan por qué la atención de seguimiento es tan crítica. El tratamiento profesional de las venas aborda el problema de raíz y reduce estos riesgos, en lugar de limitarse a tratar la herida superficial.
Si una vena varicosa ha sangrado, probablemente te preocupe evitar que vuelva a suceder. La buena noticia es que los tratamientos modernos para las venas son seguros, mínimamente invasivos y altamente efectivos. Entre las opciones más comunes se incluyen:
Estos procedimientos se realizan en un entorno ambulatorio y generalmente duran menos de una hora. La recuperación es rápida y la mayoría de las personas retoman sus actividades normales en uno o dos días. Estas técnicas no solo reducen el riesgo de sangrado, sino que también mejoran la apariencia y comodidad de tus piernas al abordar la causa subyacente de la enfermedad venosa.
En CVR, nuestros especialistas ofrecen toda la gama de tratamientos modernos para venas varicosas. Cada plan de atención se adapta a tus necesidades específicas, ya sea que tu objetivo sea prevenir otro episodio de sangrado, reducir el dolor en las piernas o recuperar la confianza en tu apariencia.
El sangrado de una vena varicosa puede ser aterrador, pero también es una señal de que tus venas necesitan atención. Saber cómo controlar el sangrado, cuándo buscar atención médica y cómo prevenir futuros problemas es la clave para mantenerte seguro. Aunque el cuidado en casa y la prevención pueden ayudar, el tratamiento profesional es la forma más confiable de mantener tus venas saludables a largo plazo.
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