Theresa M. Soto,MD, FACS, RPVI, nació y creció en la región de la nieve del norte de New York con sus tres hermanos pequeños. Allí, en la escuela secundaria, conoció a su marido y han estado felizmente casados desde 1990.
La Dra. Soto estudió en la universidad St. Bonaventure situada en Alleghany, New York (al sur de Buffalo) y se graduó Magna Cum Laude como estudiante de pre medicina. Después de graduarse, recibió una beca de las Fuerzas Aéreas para asistir a la facultad de medicina y asistió como teniente a la Facultad de Medicina de SUNY de Buffalo. Graduada con honores en la facultad de medicina, fue seleccionada para completar su residencia de obstetra/ginecóloga en Buffalo, New York, en el Children's Hospital de Buffalo. Su formación de residencia incluyó el paso por el Roswell Park Cancer Institute, el Buffalo General Hospital y los Millard Fillmore Hospitals. Al finalizar su formación de residencia, recibió el Premio Quirúrgico Te Linde a la excelencia en cirugía ginecológica.
Su primera asignación como nueva médico y Capitán en las Fuerzas Aéreas la llevó a Texas durante Tormenta del Desierto. Mientras estuvo en Texas, fue presidenta de su departamento y organizó un programa para el diagnóstico, el tratamiento y el seguimiento de la displasia cervical. Su actuación fue fundamental en el establecimiento de un programa de seguimiento que permitió a las mujeres del programa de armas nucleares participar en despliegues sin temor a ser apartadas por restricciones médicas. Ella ayudó en la planificación de simulacros con un gran número de víctimas que involucraron a los miembros de los equipos de emergencia locales y obtuvo un galardón como tiradora mientras disfrutaba del sol de Texas. La Dra. Soto permaneció en la reserva de las Fuerzas Aéreas durante varios años antes de que renunciara como Mayor y se trasladara a Virginia para criar a sus dos hijos.
La Dra. Soto comenzó a trabajar en la zona norte de Virginia en 1999, donde trabajó como OB/GYN en el condado de Fairfax hasta 2013. Durante su residencia y consulta privada, fue formadora de estudiantes, residentes y asistentes médicos; fue mentora en el Programa de Asistentes Médicos de la Universidad George Washington y sigue siendo profesora asociada de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia Commonwealth. Actualmente ejerce como profesional en el Inova Fairfax Hospital.
Ella es un médico certificado que tiene formación en tratamientos venosos e interpretación vascular. Está certificada como Médico Registrado en Interpretación Vascular por el American Registry for Diagnostic Medical Sonography ("Registro Americano de Diagnóstico Médico de Sonografía"). El Dr. Soto también es miembro del Congreso Americano de Obstetras y Ginecólogos y del American College of Surgeons ("Colegio Americano de Cirujanos"). Lleva ejerciendo como médico desde 2014 en el Center for Vein Restoration.
Después de estos gratificantes hitos profesionales, la Dra. Soto se enorgullece de formar parte en la actualidad del equipo del Center for Vein Restoration, donde los médicos han dedicado sus carreras a proporcionar alivio a los pacientes que se enfrentan a enfermedades venosas.
"Yo, personalmente, durante muchos años he sufrido los síntomas de la insuficiencia venosa. En ese momento, mis colegas y yo sabíamos poco, y fue necesaria una reunión aleatoria con un especialista venoso y linfático para comprender que mis síntomas eran producidos por la insuficiencia venosa. Inmediatamente después del tratamiento, mis síntomas desaparecieron y sigo sin tener síntomas años después”, dice ella. “Me sorprendió y decepcionó la falta de conocimientos existentes que había en nuestra comunidad profesional acerca de la enfermedad venosa. Disfruto informando a profesionales y pacientes sobre las diversas manifestaciones y tratamientos de la insuficiencia venosa. Como cirujano, disfruto reparando lo que está 'roto' para poder aliviar los dolores de mis pacientes".
Su dedicación para proporcionar tratamientos de vanguardia llega en un momento importante: se estima que 40 millones de estadounidenses sufren ahora de enfermedad venosa. La práctica médica avanza rápidamente para reducir el sufrimiento de los síntomas dolorosos y, sin embargo, con frecuencia es una afección poco diagnosticada.
“La insuficiencia venosa superficial causa angustia a muchas personas. Los tratamientos son muy simples, de muy bajo riesgo y bastante tolerables. Cuando se detectan y tratan en el estado inicial del proceso, se pueden evitar años de incomodidades. Es muy emocionante el agilizar los tratamientos y trabajar con nuevas tecnologías, lo que hace que el tratamiento de la enfermedad venosa sea aún más eficiente".
La Dra. Soto describe su trabajo personal en el campo de la insuficiencia venosa y las áreas donde tiene un enfoque particular:
"Realizó todos los tratamientos que se ofrecen en CVR. Tengo especial interés en las mujeres que están sufriendo dolor, hinchazón, problemas de venas varicosas durante el embarazo o en el posparto. Habitualmente, les explico a los proveedores de atención médica y a los pacientes que los tratamientos venosos no tienen que esperar hasta después de finalizar los años de maternidad, la salud de las piernas se puede mejorar entre embarazos. Las mujeres no tienen por qué sufrir de estos síntomas en sus piernas en los siguientes embarazos, lo que es de alivio".
Recientemente, la Dra. Soto finalizó su último caso de estudio con Varithena y los efectos tras el tratamiento. Haga clic aquí para leer este estudio.